21 marzo

 Y si te sientes perdedora  

sácate de la boca el amor  

y devuélveme todas las horas ___________ 

Cuando se acercan estas fechas, siempre me acuerdo de cuando nosotros también nos veníamos al pueblo para semana santa, y como cambia el cuento, cuando ya no tenemos que meter diez horas de coche, y claro, lo suyo es que lo mismo no nos damos cuenta, de las barbaridades que hacemos, solo por hacer lo que hace la gente, ya sabes, donde va Vicente, donde va la gente. 

Lo suyo es que cuando ya estás viviendo en un pueblo, ya uno pasa de todas estas tonterías, vamos que en el pueblo ya lo tienes todo, lugar de residencia y por supuesto de vacaciones, ya no necesitas nada más, y lo suyo es lo de saberlo llevar, que eso no todos lo pueden hacer, vamos digo yo. 

Pero es lo que hay, también esos viajes de semana santa, siempre nos traen buenos recuerdos, eso de escaparse unos días a la montaña, como al Bergadá y visitar el Pedraforca, o al Valle de Núria, o por supuesto a la parte de la desembocadura del Ebro, y dar un paseo en el barco por el Ebro, y luego comer en algún bar, donde hacen esos arroces de la zona, toda una pasada. 

Pero como siempre, cada cosa a su tiempo, y cuando ya vas teniendo una edad, lo suyo es eso, lo de poder recordar lo vivido en otros tiempos, que ahora uno ya no está para darse esas palizas, solo con pensarlo, ya se cansa uno, eso me meter el equipaje de cuatro personas, en los coches de aquellos tiempos, y si hablamos de lo de llevar un remolque, eso ya era ser muy atrevido, pero bueno, cuando se tienen menos años, se puede con todo, además de verdad. 

Luego como siempre, estaba lo del tiempo, que por lo que fuera, siempre lo teníamos en contra, y cuando se trata de hacer camping, eso siempre fastidia mucho, pero bueno, lo de siempre, la aventura es la aventura, y luego siempre estaban las fotos para recordarlo, y eso también cuenta. 

Ahora esto del tiempo es otra historia, antes lo del móvil no contaba, pero bueno, lo de siempre, que los tiempos cambian, como decía el Dylan, y ahora todo esto es diferente, pero bueno, lo suyo es que la cosa es lo de saber llevarlo, que de eso se trata. 

Como siempre, lo peor era lo de tener que salir todos en las mismas fechas, y las horas de caravana, eso no se podía evitar, pero ahí estaba la gracia, que por lo visto cada uno teníamos nuestra fórmula, para no coger las horas de caravanas, vamos que siempre cada uno se montaba su propia película, y además cada uno se creía la suya, esa siempre era la buena. 

De todas maneras, esto de hacerse mayor, no deja de ser eso, lo de poder tirar de los recuerdos, y así poder entender, que alguna vez también uno fue joven, y no le importaba meterse diez horas de coche y luego las mismas de vuelta, que cuando ya podías las montañas de Monserrat, hasta se nos saltaban las lágrimas, esa sensación, más de uno la tiene que haber sentido. 

Esto va como va, y de vez en cuando, siempre va bien de acordarse de los viejos tiempos, que es una manera de hacer memoria, y eso siempre es bueno lo de hacerlo, que nuestros recuerdos, siempre serán nuestros mejores tesoros, además de verdad. ___________  

que paso pensando que somos dos...